El central internacional del Real Madrid, Sergio Ramos, admitió este jueves que la Liga "está complicada" para el equipo blanco, tercero a 16 puntos del líder, el Barcelona, pero añadió que todavía hay posibilidades.
"La Liga se nos ha puesto muy complicada, pero no imposible, tenemos que seguir ilusionados, consiguiendo victorias", dijo Ramos en una rueda de prensa tras el entrenamiento del equipo.
"El madridismo esta obligado, toda la entidad, a seguir luchando por cada título", insistió el central, que no podrá jugar el domingo en el partido de la 18ª jornada de la Liga frente a la Real Sociedad por acumulación de tarjetas.
"Todos los jugadores, del primero hasta el último, estamos en el buen camino, la actitud siempre ha sido buena", añadió Ramos, quien achacó las últimas derrotas y malas actuaciones del equipo a una "mala racha".
"No creo que sea un problema de ansiedad, yo creo que en el fútbol vienen rachas malas, quizá en los últimos partidos no han salido las cosas como nosotros queríamos y sobre todo de cara a gol, que nos ha faltado esa eficacia que hemos tenido el año anterior", dijo Ramos.
Ramos se refería así al empate 2-2 frente al Espanyol y la derrota en la 17ª jornada de Liga 3-2 frente al Málaga, en un partido en que el técnico José Mourinho tomó la polémica decisión de sentar al portero Iker Casillas en el banquillo.
Ramos, que también atravesó momentos tensos con Mourinho al inicio de la temporada, decidió, como hizo antes Cristiano Ronaldo y el propio Casillas, restar importancia a esa decisión afirmando que "pasamos por momentos buenos, momentos malos y por encima de todo está la decisión técnica que es el del que manda. Donde hay patrón no manda marinero".
El central español insistió en que "no ha bajado la motivación en el equipo" y aseguró que él sigue jugando con la misma ilusión que cuando llegó al equipo: "el día que me falte eso me retiraré".
Ramos también tuvo palabras de elogios para sus compañero francés Raphael Varanne, del que dijo que "tiene unas características tremendas, es un central de garantías y de muchos años en el Real Madrid".
"La Liga se nos ha puesto muy complicada, pero no imposible, tenemos que seguir ilusionados, consiguiendo victorias", dijo Ramos en una rueda de prensa tras el entrenamiento del equipo.
"El madridismo esta obligado, toda la entidad, a seguir luchando por cada título", insistió el central, que no podrá jugar el domingo en el partido de la 18ª jornada de la Liga frente a la Real Sociedad por acumulación de tarjetas.
"Todos los jugadores, del primero hasta el último, estamos en el buen camino, la actitud siempre ha sido buena", añadió Ramos, quien achacó las últimas derrotas y malas actuaciones del equipo a una "mala racha".
"No creo que sea un problema de ansiedad, yo creo que en el fútbol vienen rachas malas, quizá en los últimos partidos no han salido las cosas como nosotros queríamos y sobre todo de cara a gol, que nos ha faltado esa eficacia que hemos tenido el año anterior", dijo Ramos.
Ramos se refería así al empate 2-2 frente al Espanyol y la derrota en la 17ª jornada de Liga 3-2 frente al Málaga, en un partido en que el técnico José Mourinho tomó la polémica decisión de sentar al portero Iker Casillas en el banquillo.
Ramos, que también atravesó momentos tensos con Mourinho al inicio de la temporada, decidió, como hizo antes Cristiano Ronaldo y el propio Casillas, restar importancia a esa decisión afirmando que "pasamos por momentos buenos, momentos malos y por encima de todo está la decisión técnica que es el del que manda. Donde hay patrón no manda marinero".
El central español insistió en que "no ha bajado la motivación en el equipo" y aseguró que él sigue jugando con la misma ilusión que cuando llegó al equipo: "el día que me falte eso me retiraré".
Ramos también tuvo palabras de elogios para sus compañero francés Raphael Varanne, del que dijo que "tiene unas características tremendas, es un central de garantías y de muchos años en el Real Madrid".
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