El capitán de la Juventus de Turín, Gianluigi Buffon, aún siente rabia de los errores que cometió en la ida de los cuartos de final de la Liga de Campeones de fútbol ante el Bayern Múnich.
El portero del equipo italiano quiere resarcirse mañana en la vuelta con grandes paradas y poder acercar el sueño de eliminar al reciente campeón alemán después del complicado 2-0 de Múnich, donde cometió dos errores en senddos goles alemanes.
"Probablemente fue el peor partido de mi carrera en Europa", señaló el internacional italiano.
El arquero de 35 años quiere demostrar mañana en Turín que aún no está acabado y que la Juventus todavía puede pelear por vovler a ser uno de los grandes equipos del continente.
"Gigi" Buffon aún no renuncia a su sueño de levantar el máximo trofeo continental, único gran título que le falta en su palmarés.
"El objetivo me motiva", aseguró el italiano antes de recibir en el Juventus Stadium al Bayern, que se proclamó el sábado campeón de la Bundesliga.
El entrenador del Bayern, Jupp Heynckes, alabó hoy a Buffon: "Uno de los porteros más grandes de la historia del fútbol. Para mí es una leyenda, un hombre extraordinario y un portero fantástico".
El arquero ya tiene en sus vitrinas Liga y Copa italianas y un Mundial con la "azzurra". En 2012, además, quedó subcampeón de la Eurocopa con una actuación sólo empañada en la final ante España.
La humillación sufrida en Múnich será sólo un desliz, prometió Buffon a los aficionados de la Juventus. Al fin y al cabo, los "tifosi" y el entrenador del campeón italiano, Antonio Conte, saben que muchas de las opciones de eliminar al Bayern pasan por una buena actuación de Buffon.
Y el arquero no elude la responsabilidad. El gigante de 1,91 metros, natural de Carrara, nunca se esconde. Cuando la Juventus fue descendida a la segunda división italiana por un escándalo de manipulación de partidos, Buffon fue leal a su equipo. Fabio Cannavaro se fue al Real Madrid después del Mundial, pero Buffon siguió en la "Vecchia Signora".
Desde entonces, "Gigi" es el héroe de los "tifosi", "una referencia para millones de personas", como se definió a sí mismo una vez.
Aunque fue tentado por grandes clubes de Europa con ofertas millonarias, él se quedó en Turín, donde aún tiene dos años de contrato. Si seguirá después, aún no lo sabe: "No hay que comprometerse con una fecha fija, pero aún no gané todo". Le falta la "Champions".
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