La lluvia interrumpió la quinta jornada de Roland Garros, en la que deben disputar sus respectivos partidos de tercera ronda el serbio Novak Djokovic, número uno del mundo, y el español Rafael Nadal, vigente campeón en París.
En el momento de la interrupción (10.30 GMT), se estaban disputando, entre otros, los encuentros de segunda ronda entre la australiana Samantha Stosur, novena cabeza de serie y finalista en 2010, contra la francesa Kristina Mladenovic, y la china Na Li, ganadora en 2011, y la estadounidense Bethanie Mattek-Sands.
El pasado martes, la meteorología también castigó al segundo Grand Slam de la temporada -que no cuenta con ninguna pista cubierta- e hizo que la jornada empezara con retraso y que sufriera interrupciones, llegando incluso a aplazarse catorce partidos hasta el día siguiente.
En 2012, la final entre Djokovic y Nadal tuvo que suspenderse por la lluvia en domingo y reanudarse al día siguiente, con victoria para el español, que sumó su séptimo título de Roland Garros.
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