Fernando Alonso puede sentirse satisfecho pero tranquilo sólo a medias: el español de Ferrari se va de vacaciones como líder cómodo del Mundial de Fórmula 1 tras una gran primera mitad de año, pero sabedor de que McLaren, Red Bull y un cada vez más firme Lotus están en condiciones de complicarle la vida.
Alonso llegó al período de un mes de descanso después de un Gran Premio de Hungría en el que, contra todo pronóstico por las dificultados del F2012 en el asfalto magiar, sacó más ventaja en el campeonato de pilotos en vez de perderla.
"Ha sido otro domingo mejor de lo esperado, en el que hemos sacado más de lo que pensábamos. Y creo que nadie en el 'paddock' piensa que es normal que quedemos delante de un McLaren o de un Red Bull", dijo el español tras quedar quinto, tres lugares por delante de su más inmediato perseguidor, el australiano Mark Webber.
El español suma 164 puntos y la diferencia con el piloto de Red Bull es ahora de 40. Su compañero de equipo, el alemán Sebastian Vettel está a 42 unidades, mientras que el ganador en Hungaroring, el británico Lewis Hamilton, tiene su McLaren a 47. El finlandés Kimi Raikkonen es quinto a 48 puntos de Alonso.
"Creo que Fernando puede irse de vacaciones y relajarse porque tuvo una primera parte de temporada fantástica", señaló Stefano Domenicali, jefe de Ferrari.
Pero el número uno de Maranello sabe que la distancia numérica con los rivales es irreal y lo de ser conservador en pista no puede funcionar siempre como en Hungría: "Necesitamos seguir evolucionando porque si no, los demás mejorarán y será más difícil estar en un modo defensivo".
Hungría mostró dos cosas trascendentes de cara a lo que resta: Hamilton, protagonista de un fin de semana arrollador, está muy vivo. La restante es la confirmación de Lotus como actor principal del campeonato.
El británico sacó provecho del paquete de evoluciones del McLaren y, todavía con 225 puntos en juego, es optimista: "Este fin de semana mostró que todo está por jugarse. Si conseguimos mantener este rendimiento, podemos alcanzar a Fernando. Necesitamos consistencia y mejorar el coche. Estoy seguro de que lo haremos".
Hamilton también se refirió a algo que sabe y teme toda la parrilla: "Lotus va a ganar alguna carrera. Están haciendo un gran trabajo y están mejorando su ritmo".
Raikkonen y su compañero de equipo, el francés Sebastien Grosjean, tercero en Hungría y octavo en el campeonato, tendrán un papel muy importante en la definición del torneo, ya sea porque el finlandés esté luchando por el título como porque ambos resten puntos a Alonso, Hamilton y los Red Bull.
"Tal vez estamos todavía un paso por detrás, pero estamos más cerca de la cabeza. Como sigamos así, las victorias llegarán y nos darán a mí y al equipo una buena oportunidad", observó el campeón del mundo de 2007.
El mundial de Fórmula 1 regresará el 2 de septiembre con el Gran Premio de Bélgica en Spa-Francorchamps. Será la primera de las nueve carreras que restan para el final.
Christian Horner, jefe de Red Bull, lo ve como una eternidad: "Nuestros pilotos están segundo y tercero en el campeonato de conductores. Quedan 225 puntos en juego y (la lucha por el título) será total".
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