Hace bastante tiempo que el nombre de Andrés Sánchez sonaba en la órbita del Caracas FC. Su rendimiento ha ido en ascenso desde que salió del Zamora rumbo a la capital, primero para vestir los colores del Deportivo Italia y luego del Petare.
“Ya estaba adaptado a la ciudad que es lo primordial. Luego llegué a un grupo sumamente rico en lo humano, me dieron todas las herramientas para sentirme en familia. El esfuerzo y trabajo hizo que me ganara los minutos”, señaló vía telefónica.
Su titularidad llegó gracias a la lesión de Julio “Taca” Machado. En todo el semestre solo se ha perdido el encuentro ante Aragua. Suma doce de los trece encuentros disputados por el rojo.
“Siempre he confiado en mí. Sabía que venir a un equipo como Caracas iba a ser más exigente. En el primer partido el profesor me dio la confianza, el siguiente fui al banco, pero luego por cosas de la vida se lesionó Machado y me dieron la oportunidad”, afirmó.
En este período, los capitalinos han encajado 15 goles en doce encuentros, con un promedio de 1,25 goles por partidos. El elenco dirigido por Ceferino Bencomo sigue siendo el menos goleado en la tabla Acumulada. Apenas ha recibido 18 goles en 26 encuentros, con una media de 0,69 tantos por encuentro.
“Me entiendo muy bien con Edwin Peraza. La clave es la comunicación con él y Alain Baroja. Mucho crédito tiene Jhonny Ferreira, que siempre está pendiente del trabajo táctico. Sin duda los detalles que nos corrige el profesor Ceferino y el buen momento físico que siempre nos tiene Miguel Cordero, son los que nos mantienen en el lugar en el que estamos”, dijo Sánchez.
Primer gol
Ante Gremio, se estrenó como goleador con la camiseta roja y además era su primera anotación en el torneo continental. “Luego en calma, me alegró muchísimo porque fue mi primer gol en la Libertadores, además fui el primer barinés en anotarle un gol a un equipo brasileño y poderle marcar a un portero como Dida, con tanta trayectoria me llenó de satisfacción. Es algo que jamás olvidaré”.
“Socopó”, como le llaman sus compañeros, ha disputado los cuatro partidos del rojo en la Copa. El miércoles ante Huachipato la obligación es ganar. “Ellos vienen con la necesidad, pues si no suman aquí están fuera y nosotros también estamos obligados para llegar a nueve puntos y ser firmes candidatos para clasificar a la siguiente fase”.
La clave para vencer al cuadro dirigido por Jorge Pellicer en suelo chileno “fue gracias al trabajo del grupo y sobre todo a una atajada de Baroja iniciando el partido. Ellos son fuertes en el juego aéreo, además tienen delanteros habilidosos. Nosotros hicimos ver un partido cómodo y con un resultado abultado, porque concretamos las ocasiones. A este partido llegamos en el mejor momento moral, luego de la remontada en Portuguesa”, afirmó Sánchez.
El defensor de 25 años vive una gran convivencia con la grada local. “Siempre lo vi desde la acera contraria en el derbi capitalino con una envidia sana. Se siente increíble tener una barra alentándote los 90 minutos, eso te da más confianza y te motivan más esos gritos de apoyo”.
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